lunes, 22 de diciembre de 2008

Por amor a Granada


Cultura-Granada
Por amor a Granada
El escritor Manuel Mateo y el fotógrafo Santiago Fernández firman este libro, una edición de lujo de Almuzara
22.12.08 -
BRÍGIDA GALLEGO-COÍN
GRANADA

Para escribir este libro hace falta amar Granada casi por encima de todas las cosas. Es lo que le ocurre a su autor, el escritor y editor Manuel Mateo, y al prestigioso fotógrafo Santiago Fernández Fuentes. Bajo el título 'Granada, ciudad eterna', texto y fotos se unen para desvelar la vorágine de sensaciones que despierta Granada en quien la mira y su alma intimista, romántica y sentimental. Todo en uno de los libros más extensos, voluminosos y cuidados de cuantos se han dedicado a la capital granadina .
Editado en formato de lujo por Almuzara, la editorial que dirige Manuel Pimentel, esta tarde a las 20.00 horas se presenta en el salón de plenos del Ayuntamiento, con la asistencia del alcalde.
Los autores han invertido un año de trabajo en la realización de este volumen que ha sido mimado hasta el detalle más pequeño. Los trabajos fotográficos comenzaron el invierno pasado y se extendieron hasta bien entrado septiembre. Los textos fueron escritos entre agosto y septiembre. Nada ha escapado a la mirada del fotógrafo Santiago Fernández Fuentes. El fotógrafo madrileño nos enseña una ciudad extraordinariamente bella, plural, viva y cosmopolita, de la que propone una relectura estética muy particular de sus principales iconos monumentales.
El libro, cuya portada muestra una imagen de la Alhambra iluminada al anochecer, reúne en sus más de 500 páginas todos los encantos que Granada encierra. La Alhambra y el Albaicín desde la ermita de San Miguel Alto, la cúpula de la sala de los Abencerrajes del patio de los Leones, las callejuelas y las blancas fachadas de los cármenes del Albaicín a mediodía, la armadura de la Cuadra Dorada de la Casa de los Tiros donde está inscrito el lema 'El corazón manda' o unos chicos practicando snowboard en Sierra Nevada son las primeras e impactante imágenes que el lector se encuentra. Y frente a esas fotografías de una Granada próxima y reconocible, el autor del libro ha situado, al comienzo de todo, una frase que el poeta Juan Ramón Jiménez escribió en una carta remitida a Isabelita García Lorca, en la que dice: «Luego iremos cada otoño a Granada a morir un poco».
Sensaciones
«Es un libro donde hemos tratado de sintetizar todas las sensaciones que despierta Granada -explica su autor, Manuel Mateo-. Pero, a diferencia de otros libros de la misma naturaleza en los que se ofrece una imagen bella pero fría de cualquier destino, nos hemos empeñado en desvelar el alma íntima, melancólica y muchas veces arrebatadoramente sentimental de esta ciudad. En realidad, 'Granada, ciudad eterna' es una declaración de amor que Santiago y yo hemos dedicado a esta ciudad de la que estamos enamorados».
Para Manuel Pimentel, editor de Almuzara, el libro es una de las máximas apuestas editoriales que se han acometido sobre esta ciudad. «Un libro que hacía falta, un libro que no estaba en las librerías. Es un libro que llena un vacío y que nos ha emocionado hacer. Teníamos todos los mimbres para hacer un buen trabajo: unos buenos autores, un formato espectacular y una de las ciudades más bellas del mundo. Reuniendo todo eso era difícil fracasar -asegura Pimentel-. Enamorarse de Granada es lo más fácil del mundo. Pero nosotros acabamos de firmar una razón más para hacerlo».
Las primeras páginas del libro están dedicadas a ubicar Granada en el mapa del mundo. El capítulo de historia repasa los hechos más importantes de la ciudad.
Personajes
El capítulo dedicado a los personajes de Granada repasa los nombres propios más importantes que ha dado la ciudad, muchos de ellos en activo hoy en día. La literatura repasa la vinculación de la capital con las letras a través de sus más célebres escritores y poetas, desde los cronistas andalusíes hasta Lorca, pasando por destacadas figuras de la cultura granadina como Leopoldo Torres Balbás o Jesús Bermúdez. Los itinerarios descritos en el volumen nos invitan a pasear Granada sin prisa.
Sierra Nevada posee un capítulo aparte, al igual que el ocio, las fiestas y los espectáculos. La gastronomía y la artesanía cierra el volumen.

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